martes, 15 de septiembre de 2009

el juez veloz

          No hay nada que me fastidie mas en este mundo que una vez acabado un juicio, cuando estas recogiendo papeles, bolígrafo, toga, portafolios le estas comentando al procurador qué tal ha visto el juicio, estás pensando qué le vas a decir a tu cliente y a los tres testigos que has convocado, en fin, que estas sumido en un oceano de pensamientos entre los cuales está la incertidumbre, pues bien en ese preciso momento se te dirige el juez y te dice la sentencia que va a pronunciar (huelga decir que siempre siempre que se produce esto el juicio se ha perdido) y te hunde en la miseria. ¿Como es posible que todo lo que lleva aparejado un juicio, documentación, jurisprudencia, fundamentos de derecho, jurisprudencia, horas de estudio, horas de entrevista con tu cliente un juez te lo resuelva en una vista sin titubear?.
          Reconozco que no es usual que esto pase, sin embargo el tipo de juez que actúa de esta forma es el que va de forma indefectible al fondo del asunto sin preocuparle la forma, llega a su convencimiento interno por una reflexión automática en la que las argucias legales, las tergiversaciones, la jurisprudencia las dudas razonables, las florituras técnicas, en fin los recursos que posee un letrado tienen muy poca cabida, y ello pasa porque el juez ha prejuzgado.
          Sin embargo, en http://www.vilaabogadosvalencia.com/ me he dado cuenta que este tipo de resoluciones tienen un margen muy amplio en un eventual recurso de apelación ya que todas las carencias de la sentencia de primera instancia consituyen una sólida batería de ataque en la segunda instancia.
         Sobrepongámonos a los jueces veloces con escritos meditados, estudiados y sesudos, en definitiva la ley es la ley, y hoy por hoy ello no es sinónimo de justicia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario